Escribo ya desde mi destino final: Osh, después de un larguísimo viaje desde Bishkek que duró 15 horas en taxi. Ayer llegué al Apple Hostel Osh, donde estaré dos semanas haciendo un voluntariado. Estos días no he tenido tiempo para actualizar el blog ya que han sido un poco locos, pero aquí os traigo un post sobre qué es lo que podéis ver y hacer en un día en la capital de Kirguistán, una ciudad en la que te puedes encontrar desde un gigante bazar hasta una estatua del mismísimo Lenin. 

VISITAR LA PLAZA ALA-TOO

Este es el centro neurálgico de Bishkek, una plaza de gigantescas dimensiones, con una bandera también colosal. Está dividida por la avenida Chuy. En una parte (norte) está el Museo Estatal de Historia, mientras que en la otra (sur) hay algunas fuentes con flores de muchos colores distintos.

IR A LA FERIA

En un parque llamado Panfilov se encuentra una feria no-ambulante que casi parece un parque de atracciones. Hay desde una noria hasta una montaña rusa. Se pueden encontrar puestos de helados, de algodones de azúcar e incluso un restaurante donde comer comida kirguisa a precios irrisorios. Me recuerda a la feria de Pripyat (el pueblo abandonado de Chernobyl), una feria como las que había antiguamente durante el socialismo. La feria está justo al lado de la plaza Ala-Too, en dirección noroeste.

PROBAR LA COMIDA KIRGUISA

Manti

El plato de John

Como os acabo de comentar en la feria hay un restaurante en el que puedes comer diferentes platos kirguisos. Yo opté por el manti y mi amigo John se pidió un plato con pollo y diferentes vegetales de cuyo nombre no me acuerdo. La memoria no es mi mayor fuerte en referencia a los nombres. Sólo sé que el manti estaba riquísimo. En el interior tiene cebolla y carne. Es como una especie de dumpling.

HACERLE UNA VISITA A VLADIMIR LENIN

Así es, en Bishkek aún tienen una estátua del máximo exponente de la URSS. Me encanta cuando algunos países no reniegan de su pasado y aún puedes ver algunas reminiscencias sobre éste. La estatua de Lenin está justo en la otra parte del Museo Estatal de Historia, el que se ve detrás mío en la foto que he puesto de la plaza Ala-Too. 

ENTRAR EN EL BAZAR DE OSH (BISHKEK)

Hay tantas cosas que uno se pierde… Parece ser que venden aceite y también sacos de… ¿Legumbres, trigo…?

Sólo sé que la botella de la izquierda marrón es miel (мëд – myud)

La zona de las carnes, hay incluso carne de yak

Dulces típicos de Kirguistán

El Bazaar de Osh es un lugar que primero impacta por su autenticidad pero que luego te empieza a apasionar y te comienza a transmitir unas ganas de explorarlo que no veas. Está lleno de todos tipos de comida, electrodomésticos, ropa e incluso bolsas de cemento. Es el lugar perfecto para meterte en la vida de los kirguisos, ya que no tiene NADA de turístico, como la mayoría de las cosas de Kirguistán.

PESARTE EN UNA BÁSCULA CALLEJERA

Exacto, aquí veis los pies de John, con un moreno gamba de alguien que ha viajado por medio mundo en bicicleta, pesándose por 5 som.

PROBAR EL YOGUR LÍQUIDO CON… ¡GAS!

Otra paradita de barriles, cada tres calles más o menos se puede encontrar una

No estoy equivocado, existe el yogur líquido con gas. Aquí veis el vaso que me compré en una de las paradas callejeras de tres-cuatro barriles de bebidas, muy frecuentes sobre todo en Bishkek. Las paradas ofrecen distintas bebidas, no siempre las mismas. Opté por el color azul ya que me llamaba la atención el barril, en el que se puede leer ”TAN”, en cirílico, nombre de la bebida, hecha con diferentes productos de yogur y agua carbonatada. También se puede llamar chalap. Por cierto, venden vasos de diferentes tamaños (100 cl/200 cl/500 cl/1l). Me pedí uno pequeño que me costó 12 som (15 céntimos de euro).

ALUCINAR CON LOS BLOQUES DE PISOS DE LA ÉPOCA SOCIALISTA

Es bien sabido que Kirguistán es una ex-república soviética, así que el país entero está lleno de reminiscencias hacia ese pasado, como por ejemplo los grandes y coloridos carteles en relieve en las entradas de los pueblos. Otra de esas reminiscencias es la omnipresencia de los bloques de pisos de estilo arquitectónico socialista.