Las fronteras son el más curioso de los sitios. Lugares en los que una línea separa dos formas de ver el mundo, erigidas en un estado nación, con una bandera, una moneda y un idioma oficiales. Es curioso que, según cruces a un lugar o a otro, hay diferentes cosas. El mundo está organizado, y eso es algo que me encanta. Las líneas divisorias en Europa cada vez son más inexistentes, dando lugar a situaciones donde es difícil saber cuando se ha cambiado de país o no. Si viajas a Asia o África, las fronteras están hechas con mucho más esmero, y para nada es fácil permear hacia el otro lado.
Cerca de la ciudad alemana de Aachen (Aquisgrán), encontramos la triple frontera entre Alemania, Bélgica y Países Bajos: el Dreilandenpunt (NL), Dreiländereck (DE) o les Trois Bornes (BE). Puesto que estábamos en la zona, quisimos echarle un vistazo al que fue el primero de los tripoints que he visitado, y ya de paso pernoctar justo al lado, en nuestra maravillosa Opel Vivaro de alquiler.
Aquí, con una pierna en Bélgica y otra en los Países Bajos
ALEMANIA, BÉLGICA Y PAÍSES BAJOS PARA “DUMMIES”
Alemania: el motor económico de Europa, país dividido en estados, reunificado en 1990, hogar de la Selva Negra, el Oktoberfest de Múnich y el barrio de Sankt Pauli de Hamburgo. Muchos estereotipos sobre ellos. Me gusta pensar que son el Japón de Europa aunque si los comparamos con Japón parecen unos campesinos en un Starbucks.
Bélgica: dividido en una zona flamenca (Flandes) y francófona (Región Valona). País con dos identidades que de una cierta forma ha conseguido sobrevivir en forma de monarquía, capitalizando la UE desde Bruselas, una ciudad que muchos consideran fea pero que a mí me gusta. Eso sí, hogar del mayor descalabro urbano que he visto: Charleroi.
Países Bajos: a veces confundido con Holanda (región europea de los mismos Países Bajos). El colonialismo les regaló muchos territorios en el Caribe: Aruba, Sint Maarten, Saba, Bonaire y Curaçao. Llegaron incluso a poseer Sudáfrica e Indonesia. Monarquía, carriles bici en paralelo a las carreteras, amantes de los arenques, se van a dormir a las seis de la tarde.
LAS TRES PARTES DEL DREILANDENPUNT
PARTE HOLANDESA 🇳🇱
Por si un tripoint no fuera suficiente, en Dreilandenpunt también encontramos el lugar más alto de toda Holanda (322 metros de altura). La montaña más alta de los Países Bajos es el monte Scenery (887 m), en la isla caribeña de Saba. Cabe recordar que Holanda es uno de los países de menor altitud, incluso teniendo partes que se sitúan bajo el nivel del mar. El problema de Holanda con el mar es algo que viene de hace mucho tiempo, de ahí que se pusiera en marcha un sistema súper sofisticado de diques que protegen al país de quedar anegado por el Mar del Norte.
En la parte neerlandesa también encontramos una especie de parque temático, con un laberinto y una especie de cafetería. Además, un poco más al norte, está la torre Wilhelminatoren, un sitio que ofrece una buena perspectiva de toda la zona. Este sería técnicamente el punto más alto de Holanda, pero al ser una construcción no cuenta.
Más allá, podemos visitar la ciudad de Maastricht, a unos veinte minutos en coche.
Cafetería en el Dreilandenpunt holandés
PARTE ALEMANA 🇩🇪
La zona alemana es quizás la que menos secreto tiene. Es simplemente todo bosque. En ella no hay ninguna infraestructura.
Lo interesante de la parte alemana es quizás la cercanía de la ciudad de Aachen, lugar en el que hubo una gran batalla entre aliados y alemanes en 1944. Es la ciudad más al oeste de Alemania, si no contamos los pueblos más pequeños. Tiene un bonito centro histórico y una preciosa catedral.
PARTE BELGA 🇧🇪
La parte belga es ciertamente curiosa, ya que cerca de allí encontramos las zonas germanoparlantes del país, con Eupen y St. Vith como ciudades más destacadas. En esta parte fue en la que pernoctamos, en el párquing que hay al lado de la Torre Baldwin, la torre de la parte belga.
Cartel informativo sobre las diferentes rutas que se pueden hacer por los alrededores
El DREILANDENPUNT EN IMÁGENES
El Dreilandenpunt en su totalidad. Bonitas cenas se pueden compartir en este sitio. La foto está hecha en suelo neerlandés.
Tumba de Pierre Roiseux, en la parte belga. Es curioso como un país con un sentimiento de nación tan poco ejercitado es uno solo a la hora de rememorar a los caídos en combate.
Posando en el Dreilandenpunt
La primera vez en mi vida que piso tres países a la vez.
Y bueno, hasta aquí este descafeinado pero interesante post sobre el tripoint entre Países Bajos, Bélgica y Alemania, similar a ese que hice sobre la frontera entre Marruecos y Argelia en Saïdia. Ojalá alguna vez tenga el placer de documentaros algún tripoint más chungo, como el que hay entre Rusia, Corea del Norte y China, todo un reto.
¡Hasta el próximo artículo chic@s! Gracias un día más por leerme 😉