Hoy ha empezado el largo viaje que emprenderé desde hoy 10 de julio de 2018 hasta el día 14 de agosto. Un viaje que me va a llevar hasta Osh, la segunda ciudad más grande de todo Kirguistán, donde haré un Workaway de dos semanas. Para ello, tengo que hacer un largo viaje: Barcelona-Budapest-Astana-Almaty-Bishkek-Osh.

Todo ha empezado después de comerme unos fideos instantáneos que he comprado en el pakistaní. Después de ello, me he dirigido hasta la parada del bus para coger el L77 hacia el Aeropuerto del Prat, en Barcelona. Mi vuelo de Ryanair hacia Budapest salía a las 17:10 aproximadamente pero no se quién se ha cubierto de gloria y hemos tenido un retraso de casi una hora. He aterrizado a las 20:20 en Hungría, que por cierto, es la primera vez que la visito y tenía muchas ganas. Mis primeras impresiones de Budapest son la de una ciudad que conserva aún una pizca de su largo pasado comunista pero que está casi afianzada como capital europea turística, a lo París, Londres, Roma o Praga. Ahora mismo son las 23:38 en el Opera Hostel de Budapest, y tengo que ir a dormir temprano ya que a las 12:20 sale mi vuelo de cinco horas con Wizzair hasta la capital de Kazajistán: Astana. Tengo muchísimas ganas y quiero ver qué es lo que me depara la inexplorada región de Asia Central. Os dejo algunas fotos que he hecho a lo largo del día.

El L77 que me lleva desde Sant Joan Despí hasta el Aeropuerto del Prat

Mis vistas durante la mayor parte del viaje, en el asiento 14E 

El pavo que tenía al lado estaba durmiendo, así que he aprovechado para chupar un poco de ventana y probar el filtro de mi madre de color amarillento

La basílica de Szent István

Así indican las calles en Budapest, en plan rococó

Los tramvías son preciosos

El Parlamento de Hungría, sin duda el lugar más famoso de todo el país, a orillas del Danubio

Un estanco húngaro